miércoles, 8 de mayo de 2013

Fire Emblem: Awakening



Fire Emblem es una de las sagas que más me gusta, cuando me conquistó con su primer juego en España hace ya casi una década. Desde entonces, en un altar tengo esta saga. Y cómo no, esta entrega tenía que ser especial, llevando un hype increíble desde que supe de él.
En esta entrega es difícil incorporar nuevas cosas que hagan más dinámico su estilo de juego, puesto que es un juego de estrategia donde la gracia está en matar sin que te maten y mantener a todas las unidades con vida. Pues lo han conseguido, han hecho que el juego gane en jugabilidad todavía más.
Para ello se han encargado de poder usar dos personajes juntos, lo cual lleva diversas ventajas, como una subida de los stats en el personaje que se agrupe, según su oficio, el aumento de la amistad con este (tema que desarrollaré más adelante) y un porcentaje que servirá tanto para que el personaje agrupado dé otro golpe como para que bloquee al enemigo. Este apartado es sin duda el que más hay que destacar de esta nueva entrega, ya que abre un nuevo camino y ayuda al diseño de nuevas estrategias.
Sobre la amistad, ya he comentado cómo se gana amistad, pero su función va más allá. Como en entregas anteriores, la amistad hace que los personajes se apoyen entre sí, cosa que beneficiará luego en el campo de batalla. Ahora, además de tener una gran variedad de diálogos y muy variados, este factor aportará mayores beneficios con la combinación del comando Agrupar, y además, permitirá que se pueda tener hijos, cosa que aumenta más la jugabilidad.
Otro aspecto que vuelven a recuperar de entregas anteriores es el poder movernos con libertad por el mapa. Esto servirá tanto para visitar lugares anteriores, donde podremos comprar ítems, como para luchar contra resurrectos, que servirá como entrenamiento para nuestras unidades.
Este aspecto alargará la duración infinitamente, puesto que permetirá luchar infinitamente contra monstruos para subir nuestro nivel y conseguir unos equipos realmente dopados.
Después encontramos las misiones secundarias, llamadas Desvíos. Servirán tanto como para alistar a los hijos, como para luchar contra equipos de SpotPass (DLC gratuitos) y también para misiones secundarias en sí, donde podremos alistar, entre otros, a la máquina de matar más dopada que he visto en toda la saga de FE.
El apartado gráfico es una delicia. Cada personaje tendrá su propio icono en el mapa, sin contar las espectaculares escenas, los mapeados tan coloridos (por fin acabamos con ese 3D espantoso de los de sobremesa) y sobretodo, las batallas.
La opción del cuartel es una curiosidad más, que sirve para darle más cariño a los personajes, ya que tendrás conversaciones entre ellos donde conseguiran armas, apoyo, experiencia e incluso tendrán cumpleaños.
El sonido está bastante bien, con algunos buenos temazos, pero no son pegadizos, como hemos visto en entregas anteriores.
Los personajes son una delicia. Cada uno tiene una personalidad bien definida, y se agradece, por que dejan de ser planos y les coges cariño, o al revés, les acabas cogiendo odio. Además, el "dibujante" se nota que ha cambiado, y aunque al principio me costaba acostumbrarme, los nuevos diseños me encantan.
Por cierto, encontramos de nuevo ramificaciones en las promociones, y con esto, nuevas clases, para dar un poco más de salida a la jugabilidad y explotar un poco más este estilo. Así que en una partida puedes promocionar a un oficio y en otra a otro, para ver sus pros y sus contras y qué oficio se ajusta más a tu estilo.
Por otro lado, sobre las promociones, encontramos un cambio que no termina de convencerme. Se trata de los Segundo Sellos. Estos te permiten cambiar de oficio a tu unidad, cosa que de por sí ya no me convence, pero el peor apartado no está ahí, si no que además, una vez alcanzas el máximo nivel con una unidad, este sello te permite devolverlo al nivel 1 del mismo oficio, para poder explotar más sus estadísticas y crear un ejército de dopados. Este punto no me gusta nada. Vengo de jugar 7 entregas donde, por intuición, debes elegir bien a tus unidades, por que una vez hayas progresado, si esas unidades no son buenas, te joderás. Aquí no pasará eso, ya que todas, mediante segundos sellos, acabarán siendo la ostia.
Otro apartado que hace más dinámico el juego son las habilidades, como ya hemos visto en los de sobremesa. Aquí siguen más o menos un estilo semejante, sólo que dependerán del oficio o, en el caso de los hijos, de las habilidades que tenían sus padres.
Y por último otro aspecto que no me ha convencido, la historia. Es una historia muy simplona y que podría haber dado más de sí, y más aún con las escenas que incorporan en los mejores momentos, pero acaba quedéndose en una historia fácil, sin apenas intriga y en la que los hechos ocurren de manera muy rápida.

+ Nuevas mejoras al sistema de batalla. Duración y posibilidades. Personajes carismáticos. Habilidades. Paternidad.

-Historia. Segundos Sellos.

Puntuación: 9.2