Far Cry 4
Tenía unas muy altas expectativas puestas en él. Far cry 3 fue de lo mejor que pude jugar por allá el 2014 (lo jugué como medio año más tarde de que saliera), y su mecánica me enamoró. Esperaba encontrarme con un juego que siguiera sus líneas y me enamorase de nuevo... Y no pudo ser así.
En primer lugar, Ubisoft no es tonto. Les funcionó muy bien toda la mecánica de Far Cry 3 (por si quieren recordarlo) y pretendiero seguir su línea... Hasta tal punto que la imitaron por completo, pero esta vez, dando un muy mal resultado. Una de las cosas que me encantó en la anterior entrega, era su argumento, así como el villano final. Sin embargo, aquí tenemos una historia que no tiene nada de miga, tan solo avanza, sigue a uno de los dos líderes de la Senda, y sobretodo, mata sin más. Las decisiones son muy fáciles de prevenir, y no aportan nada al resultado final, una decepción. Y luego está el villano, que en un principio, aparenta tener ese toque de locura (¿imitación a Vaas? ¿Dónde?) y finalmente acaba en un intento de sociópata previsible a más no poder, sin nada que motive interesarte en él. Una decepción tras otra.
Las misiones son de lo más cíclicas posibles. Siempre son iguales, llegas a un lugar, una horda de enemigos con los que acabar, otra más, otra más... Y ya sí, ya acaba la misión. Y así en todas. No existe sobre la práctica lo que nos proponen en la teoría. El tema de poder afrontar las misiones de dos formas, con sigilo (forma que podría interesar) o a saco. Sólo se pueden acabar de la segunda manera, acabando con varias hordas, y procurando ocultarte para curarte cada dos por tres. Además, como ya dije antes, el guión tampoco da para más. Es ir al lugar y barrer al enemigo, sin más. No incita a interesarte por la historia, que queda muy rezagada en un segundo plano. Lo principal es matar y matar, usando nuevas armas/habilidades, que conseguiremos con la progresión del personaje.
Se sabe desde un principio como puede acabar la historia según optemos por ayudar a un líder u otro de la Senda. Amita y Sabal son los personajes más planos y previsibles que te encontrarás en mucho tiempo, así que sigue a uno y ya sabes qué pasará con el otro. Aunque la decisión final es tuya, basta saber cómo acaba todo.
Por otro lado, y el punto sin duda más bueno del juego, y de nuevo copiado de la anterior entrega, es el poder descubrir el gran escenario que tenemos. Hay muchos secretos, y montón de misiones secundarias, lo que aporta un toque de exploración y explotación de cada rincón del mapa. En la anterior entrega, quise descubrir todo lo que podía ofrecerme el mapeado, y completé todas las misiones secundarias. En este, tras la decepción que me llevé, dejé de lado la exploración y el cooperativo/competitivo. Sin duda alguna, su fuerte es la exploración y los escenarios vivos.
Gráficamente utiliza un estilo muy reciclado, calcado a su anterior entrega. También hablo de la versión de X360, no he tenido el gusto de jugar en consolas de nueva generación, donde seguro que la cosa cambia. Además, también hay un montón de bugs. En el sonido, está muy bien ambientado, trasmite encontrarte en esos parajes, y el doblaje ayuda mucho.
La duración, si te ciñes al modo historia no es nada del otro mundo, pero la gracia de este sandbox, siempre que te haya gustado, es poder explotarlo todo al máximo y descubrir todos los secretos del lugar donde te encuentras. Además, la progresión del personaje, es un aliciente a completarlo.
En conclusión, es una entrega que bebe en exceso de su anterior entrega. Entrega que salió bastante bien y a mi me enamoró, pero esta vez, todo el clon salió bastante mal en conjunto. Muy decepcionante.
+ Escenarios explorables. Misiones secundarias. Progresión del personaje.
- Horrenda imitación. Mal argumento. Personajes planos y previsibles.
Total: 5
