martes, 7 de julio de 2015

La Tierra Media: sombras de Mordor

La Tierra Media: sombras de Mordor
El juego es una mezcla entre sandbox y típico juego de aventura, solo que no llega a profundizar del todo en ninguna de estas dos vertientes. Lo bueno de esta combinación reside en la duración, ya que no se alarga de manera innecesaria como algunos sandbox, pero tampoco se queda corto como muchos juegos de aventuras, la cual cosa permite tener una duración correcta con lo que se narra.

Me esperaba una historia que te metiera de lleno en el mundillo, unas batallas increíbles, buena progresión del personaje y una jugabilidad que destacara. El caso es que, aunque no flaquea en casi nada de lo anterior, no deja de ser un deja vú constante.

La trama no me convenció. Primero, que es difícil situarte y seguirla, y segundo, que no tiene miga. Es un "tiene que pasar esto" desde el minuto 1 y se cumple sin ninguna sorpresa. El protagonista (o protas), en mi opinión, se le podía explotar más su historia, y los secundarios a penas tienen un papel importante.

Las batallas por otro lado, son bastante espectaculares. Aunque bebe en exceso de otras sagas como Assassin's Creed o Batman, el resultado final le sienta muy bien. Son peleas a lo grande, con mucha escena gore, diversos movimientos y maneras de acabar con los enemigos (en relación a la progresión del personaje, cosa que comentaré a continuación) y con el aliciente de que algunos enemigos no son moco de pavo, lo que nos hará morir más de una vez, y hacerlos más fuertes (sistema de caudillos, que también comentaré más adelante).

Sobre la progresión del jugador, comentar lo que ya se ve en la mayoría de juegos, diversas ramas de progresión y poder desbloquear las habilidades según la experiencia que vayamos consiguiendo, además de poder mejorar nuestras armas con runas. Esto añade variedad a la forma de acabar con los enemigos o plantear las misiones.

Respecto a su apartado más sandbox, destacar que hay bastantes cosas por hacer por el mapa, desde recolectar plantas hasta matar por matar pasando por las sidequests o buscar artefactos. El mayor de los problemas reside en que los escenarios, a mi parecer, se hacen demasiado grandes por culpa de estar muy vacíos. No hay variedad, estamos en un yermo, pradera o algún castillo derruido y punto. Cuando podrían haber llenado el mapa con más mimo. Se entiende que esté todo tan desolado por la historia que narra, no obstante, si añades tantas cosas que hacer, lo normal es añadir variedad al mapeado, hacer que explorarlo sea un aliciente, algo agradable, y no que se deba hacer únicamente para completar del todo el juego.

El seguimiento de los caudillos es algo que no había visto antes. No voy a tratar de explicarlo (para ello está el juego), pero sí a hacer una pequeña crítica; es algo innovador, y por lo cual, te esperas algo más, pero la realidad es que una vez entiendes el funcionamiento y te metes más en el seguimiento de los caudillos (en una misión debes dominar su funcionamiento) te das cuenta que está algo desaprovechado, y que no importa demasiado qué caudillo sea el que manda ni nada parecido. Es un buscar a algún súbdito, sacarle información y matar, algo que se acaba convirtiendo en mecánico. No sabría decir cómo explotar más este apartado, la verdad, pero creo que se quedó a medio camino. De todas maneras, se agradece ver algo innovador, y más viniendo de un juego que ha tomado demasiadas referencias en otras sagas.

Por último finalizar con que el juego cuenta con un doblaje bastante bueno, y como siempre digo, me encanta que se apoye tanto el doblaje al español últimamente. Los gráficos también lucen bien, quizá algo vacío los escenarios, como ya dije, y algún tirón por aquí y por allá, pero recuerda mucho a las pelis, y alguien que sea fan, le sacará una sonrisa.

+ Batallas. Progresión del jugador. Abundantes sidequests. 
- Historia sosa. Copia de otras sagas. Escenarios vacíos.

Nota: 7.2


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